La última vez que salió en televisión lloraba emocionada para decir
adiós a Sé lo que hicísteis, un proyecto que había visto nacer y en el
que se notaba que estaba a gusto. Patricia Conde regresa nuevamente a La
Sexta aunque no lo hace como presentadora sino como parte del elenco de
BuenAgente, la comedia que protagonizan Antonio Molero y Malena Alterio
y que ha regresado con más fuerza en su segunda temporada.
-¿Qué le ha hecho volver a la televisión con una serie como BuenAgente?
-Me
parece una serie muy rápida, muy fresquita, divertida. Es fácil de ver.
Y contando con Malena Alterio, Arturo Valls, Antonio Molero…pues qué
más se puede pedir. Lo que más me gusta es interpretar y me apetecía
mucho este proyecto. Y si es en laSexta y con Globomedia, pues mucho
mejor.
-¿Cómo es Paula, su personaje?
-Es
una chica bastante normal para lo que ha vivido. Se ha criado en el
extrarradio, es la menor de cinco hermanos, todos chicos, y de pequeña
jugaba a robar bolsos y cosas así. Le encantaba la policía y era
listilla y un poco macarra. Ahora se hace mayor y ve la posibilidad de
meterse a policía que es lo que le gusta. Es explosiva, dice lo primero
que piensa y saca la pistola a la mínima. Ella va a otro ritmo y, de
repente, puede liarla bastante. Paula es una chica femenina pero no va
de sexy.
-¿Tiene algo en común con ella?
-Para
nada. El carácter de ella y el mío son totalmente distintos. Y el
equipo de maquillaje, peluquería y caracterización se encarga de que
tampoco seamos iguales físicamente . Yo tiro más para lo tímido. Para
hacer mi trabajo tengo que quitarme el caparazón de timidez, pero yo soy
muy tímida. Con mis amigos sí saco mi lado macarra, como el de Paula,
pero sólo en mi círculo más íntimo, pero no lo suelo sacar, ni siquiera
cuando voy con el coche.
-Después de un adiós tan amargo para usted como SLQH, ¿prefería hacer ficción antes que presentar?
-Ya
de por sí, presentar un programa es difícil. Desde pequeña yo siempre
he querido interpretar guiones por lo fácil que me resulta decir, ¿aquí
queréis que llore? pues lloro, ¿aquí queréis que salga corriendo o
gritando? pues lo hago. Entonces para mí eso es muy fácil. Lo difícil es
presentar. Lo que más me aterra es hablar de mis sentimientos, entonces
me cuesta mucho presentar programas que se metan en los sentimientos de
la gente. Lo que me gusta es interpretar, que me den un papel y me
digan qué tengo que hacer. Y me apetecía mucho seguir con Globomedia. De
lo que he visto, los mejores guionistas, las mejores series, los
mejores formatos son de Globomedia. Y la carrera de un actor es una
carrera de largo recorrido. Hay que ir poco a poco y hacer trabajos que
te enriquezcan.
-¿Le han ofrecido otros proyectos?
-Sí,
me han ofrecido el oro y el moro y formatos de todo tipo, pero yo donde
me siento segura es aquí. He tenido que descartar muchos pero me he
quedado con éste. Me voy a centrar en la serie nada más.
-A
pesar de que le han ofrecido trabajo en otras cadenas, sigue apostando
por La Sexta sabiendo que ésta atraviesa un momento complicado.
-No
es una cuestión ni de que la cadena confíe en mí ni de que yo confíe en
ellos. Creo que trabajando aquí una temporada voy a ganar más, me voy a
enriquecer más con lo que quiero que con lo que me dan fuera. Es
aumentar mi currículum con calidad, de manera grata, entonces intento no
pensar en lo que puede pasar en un futuro, sino en lo que esto me va a
aportar en este momento..
-Entonces, aquel que la quiera fichar, ¿mejor que lo haga con un buen proyecto que con un buen talón?
-Suena
muy tópico pero es verdad. Habrá otros que no sepan ahorrar (risas). Yo
he sabido hacerlo y prefiero curarme en salud y divertirme. A mí
cualquier proyecto que me parezca creativo me va a gustar, hay un vacío
de creatividad en la televisión...van a lo burdo, a lo fácil, a lo
rápido… No quiero tener que llorar todas las mañanas por lo que tenga
que hacer, me daría cabezazos. Eso además se me nota, no puedo ser
falsa. Puedo interpretar todo lo que me hayan escrito en un papel
delante de cámara sin tener que ser yo. Pero como esté en desacuerdo con
algo que me manden en un trabajo, se me nota bastante. Cuando no me
sale de dentro no me sale bien.
-Usted va más allá. Es presentadora, actriz pero también se ha convertido en icono de moda ¿Qué le parece?
-Yo
siempre he dicho que esto que se crea alrededor de mi trabajo es un
poco circo. Paso de mostrar todo lo de fuera de mi trabajo, lo que tenga
que ver con mi vida. Pero lo del icono de moda es algo que siempre me
ha gustado, aunque no lo hago queriendo. Desde pequeña me ha llamado
mucho la atención el tema de la moda, ponerme lo que me gusta. Me leo
todas las revistas de moda pero tampoco me va la vida en ello. Ahora he
estado cuatro meses en chanclas, con vaqueros y con una coleta. Y es
estado tan cómoda... Lo de estar bien lo hago por mí, no porque me vea
el mundo entero, porque eso me agobia, pero si sirve para que las chicas
a las que les gusta mi forma de vestir me sigan... yo encantada.
-Ha dicho varias veces que es tímida pero ha hecho hasta un spot en braguitas ¿Cómo puede hacerlo?
-Porque
el guión era cojonudo. A mí me pasan un guión y digo: 'Este guión mola
un montón', pero si hay una parte que salgo encima de un hombre
desnuda...entonces no me apetece, no lo hago. Pero si luego me dicen en
un spot o un programa o una serie que voy a salir patinando, saltando,
súper divertida, en una sala blanquita, todo muy sexy, con unas
braguitas de mil colorines que me van a sentar estupendamente... pues
sí. Todo fue muy cuidado y, además, con la posibilidad de grabar un
trocito y, si no me gustaba, no lo hacía. Cuando veo algo así, digo esto
sí, esto es divertido. Las cosas no me gustan cuando dejan de ser
divertidas.